Autoamor
Autoamor
Autoamor, acción que consiste en aplicar con persistente responsabilidad lo mejor de las potencialidades, conocimientos, capacidades y recursos para consolidar y fomentar una vida útil, saludable y feliz. Es el tercer principio esencial del Ser humano que se fundamenta en: “Por el bienestar no es suficiente con hacer bien las cosas, es prioritario SER y disfrutar haciendo con amor, lo mejor de lo que ya se sabe hacer muy bien”.
La ley de autoamor:
“A pesar de mis costumbres, deseos, gustos, impulsos o caprichos; de manera consciente, adquiero y consumo sólo lo que conozco que es útil, necesario y beneficioso para cada día estar más SANO; evito y supero la tentación de exponerme, comprar o consumir todo lo que sea inútil, innecesario y dañino para la salud de mi cuerpo, mente y espíritu”.
Su aplicación requiere la flexibilidad mental, que aporta el cultivo de la sabiduría para elevar el nivel de consciencia, afín de estar abierto a desaprender, desapegarse y liberarse de falsas creencias limitadoras y hábitos de vida autodestructivos; reaprender, aprehender y aplicar con responsable autodisciplina un estilo de vida saludable. Lo más contraproducente para estar sano y autodestruir la salud, es la falta de confianza en sí mismo, que alimenta el apego al pasado o la rigidez mental sumisa y auto saboteadora.
Quien aplica la Ley de autoamor, gerencia con sabiduría su vida, “ocupándose de tomar consciencia de cómo Ser íntegro y sano”; por ello de manera responsable, con autodisciplina recorre con persistencia el camino del estilo de vida saludable, aprovechando con eficiencia los 21 factores sanadores 8:
1. Agua limpia 2. Aire puro 3. Alimento saludable 4. Ambiente natural 5. Amor 6. Amistad 7. Atención consciente |
8. Autodisciplina 9. Buen humor 10. Creatividad 11. Cultivo de la sabiduría. 12. Descanso 13. Ejercicio psico-físico 14. Espiritualidad |
15. Fe en el Creador 16. Gozo existencial 17. Meditación y oración 18. Luz solar 19. Perdón 20. Recreación 21. Sexo responsable |
Quien se ama, se ocupa de sanar su vida, por ello se apoya en el código moral de conducta sanadora, que es un conjunto de tres principios fundamentales para el fomento del bienestar de la humanidad, que como estrellas radiantes iluminan el interior de cada Ser humano:
1. Evito hacerme daño y aplico con excelencia lo mejor para mi bienestar.
2. Evito hacerle daño a los demás, sirviéndole con lo mejor para su bienestar.
3. Evito hacerle daño a la naturaleza y a las cosas.
Con persistente disciplina y responsabilidad se ocupa de aplicar la Ley de autoamor, que de aprovecharse con persistencia fomenta el autocontrol. Así la persona, la familia y la comunidad gozan un creciente nivel de paz y armonía.
Cuando los integrantes de una comunidad o país aplican con persistencia los tres componentes del código moral de conducta sanadora, ahorran grandes recursos; ya no los necesitan para tratar enfermedades, evitar sufrimientos, colocar límites o imponer el cumplimiento de la ley. Por ello, es la manera más económica y rentable de gerencia gubernamental.
La aplicación del estilo de vida saludable está relacionada con el autoamor, que se simplifica en el siguiente acróstico.
Aire puro, respirándolo con el diafragma.
Unión al Creador, como su humilde servidor de paz.
Tomar agua pura, un promedio de dos litros al día.
Optimo ejercicio, un mínimo de 30 min. por día.
Alimentación saludable, natural y antioxidante.
Más descanso y sana recreación.
Optima luz solar: al amanecer y al atardecer.
Responsable autodisciplina, para superar las tentaciones.
Sexo responsable y consciente, hecho con amor.
Incondicional amistad, en relación ganar-ganar.
El Ser humano que se ama se ocupa de aplicar un estilo de vida saludable. De manera natural y espontánea es coherente con la ley de autoamor. Tiene como prioridad la salud global para fomentar su vitalidad de manera creativa en el proceso de aprendizaje significativo. Facilita la evolución y transcendencia de su nivel de consciencia, en armonía con sus principios.
Su autorrealización personal se manifiesta con el gozo existencial y disfrute del bienestar de lo que le aporta la madre naturaleza, le provee la ciencia y tecnología, lo facilitado por los semejantes y los recursos propios. Tal como se describe en el cuadro siguiente.
Quien se ama, respeta la vida, es responsable, honesto y disciplinado de hacer con excelencia lo mejor de lo que ya sabe hacer muy bien, por sí mismo y por su entorno.
Cuadro 2. Diferencias entre quien se ama y quien se quiere.
QUIEN SE AMA |
QUIEN SE QUIERE |
Quien se ama, se cuida y de manera consciente desde su poder interno se facilita las mejores condiciones de vida para ser saludable, útil y feliz, actuando para elevar su consciencia de autoamor y comunicarse con sabiduría. | _ Quien se quiere, de manera inconsciente se limita, buscando en el poder externo de los demás o las cosas, las condiciones para poder subsistir. De manera reactiva o impulsiva, como adicto al sufrimiento, se expone a factores de riesgo para su salud, apegado a hábitos autodestructivos. |
• Quien se ama, se comprende y se acepta tal como es, invierte lo mejor de sí para desarrollar el máximo de su potencial, por medio del aprendizaje y la mejora contínua de su estilo de vida saludable. | _ Quien se quiere, se rechaza, buscando ocultar esa parte de sí que no quiere aceptar y reprime. Vive en un círculo vicioso obsesivo, repitiendo una y otra vez situaciones que mantienen su adicción. Asume una actitud de víctima incapaz de superar su enfermedad. |
• Quien se ama esta desapegado al entorno, vive centrado aceptándose desde su poder interior, en paz y equilibrio, porque confía en sí mismo. | _ Quien se quiere, está apegado a la aprobación y aceptación del poder de su entorno o cosas. Se menosprecia, desvaloriza y actúa con miedo, por falta de confianza en sí mismo. |
El amor es tan absoluto como el embarazo, me amo plenamente o sólo me quiero.
Con humilde honestidad: ¿Realmente te AMAS?
escuche el programa por Radio nacional y me parecio bien bueno. Todod los sabados escucho ese programa